Con Carmina Burana, el Teatro Colón propone una fiesta para abrir la temporada

La temporada 2024 del Teatro Colón se abre este martes 12 de marzo con un acontecimiento muy festivo por dos motivos. Por un lado, porque la obra Carmina Burana -estrenada originalmente en 1937 en la Opera de Francfort-, y que bien puede llamarse el corazón de este acontecimiento, es un título sumamente popular. Por otro lado, porque reúne, por primera vez después de muchos años, a todos los excelentes cuerpos estables del Teatro en esta gran producción, cuya coreografía pertenece al conocido creador Mauricio Wainrot.

Cabe agregar que es tan extendida la popularidad de Carmina Burana que un número considerable de músicos, incluso del mundo del rock y del tecno, le dieron una nueva vida. Por otra parte, la sección llamada “Fortuna” fue utilizada en avisos comerciales y el artista pop Michael Jackson recurrió a la misma sección para promocionar su gira mundial en 1995. Otros de sus temas se utilizaron con frecuencia en el cine y en eventos deportivos.

Aunque Carl Orff pensó su obra con un propósito no necesariamente teatral sino como una gran cantata, su Carmina Burana suscitó luego el interés, que se sostuvo a lo largo del tiempo, de innumerables coreógrafos atraídos en gran medida por su potente organización rítmica.

Hay personajes y varios núcleos temáticos en el guion de la Carmina… original; pero cada coreógrafo ha encontrado una manera propia, más narrativa o más abstracta, de abordar la partitura.

Mauricio Wainrot llevó a escena la obra inspirada en la partitura de Carl Orff (Munich, 1895-1982), que había sido originalmente concebida para un gran ensamble musical con cantantes solistas, coros y orquesta; en su caso la influencia fue enteramente musical. Pero antes de internarse en este aspecto, cuenta lo siguiente:

“Se cumple ahora el 25 aniversario del estreno de Carmina Burana que creé para el Ballet Real de Flandes: allí fui coreógrafo residente durante once años. En el comienzo de cada nueva temporada Robert Denvers, director del Ballet Real de Flandes, me preguntaba cuál iba a ser mi próxima obra para la compañía”.

“Creo que Carmina… fue la quinta producción que hice para ellos. Después de la primera, que tuvo mucho éxito, Robert Denvers me pidió que creara una versión propia de El pájaro de fuego (sobre la partitura del mismo nombre de Igor Stravinsky). Primeramente Robert había pensado incluir la versión de Maurice Béjart, que ya existía, pero después decidió que quería algo totalmente nuevo. Mis obras para el Ballet de Flandes venían siendo siempre estrenos”.

Fuente: Clarin

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *